El año 2024 marca un cambio importante para el mercado inmobiliario francés. De hecho, las dinámicas que han estructurado este sector durante décadas se están desvaneciendo gradualmente, lo que da paso a transformaciones profundas. La caída masiva de las transacciones, la tímida reactivación del poder adquisitivo inmobiliario y la creciente importancia de los criterios energéticos rediseñan las prioridades de compradores y vendedores. Estas transformaciones van más allá de las cifras: reflejan los impactos acumulativos de la crisis iniciada en 2022 y de las incertidumbres económicas. A través de su Informe inmobiliario 2024, los Notarios de Francia iluminan estas evoluciones contrastantes. Su análisis va más allá de la simple observación. Explora perspectivas a corto plazo y abre vías para un posible relanzamiento en 2025. Estas proyecciones iluminan los desafíos inmediatos, pero también las adaptaciones necesarias para enfrentar un mercado en plena transformación.