Mar 31 Dic 2024 ▪
6 min de lectura
▪
por
Luc Jose A.
El año 2024 quedará en los anales como un hito decisivo para Nvidia, figura emblemática de la innovación tecnológica en la era de la inteligencia artificial. Gracias a inversiones visionarias y avances estratégicos, la empresa ha alcanzado una capitalización bursátil sin precedentes de 3 billones de dólares, lo que consolida su papel de líder mundial. Este éxito se basa en gran medida en sus chips, que equipan los principales centros de datos globales, y en su ecosistema CUDA, aclamado por los desarrolladores. Sin embargo, este triunfo viene acompañado de desafíos crecientes. La irrupción de competidores ambiciosos, como AMD y Broadcom, intensifica la presión. Además, clientes clave, incluidos Google y Amazon, están explorando activamente alternativas para reducir su dependencia de Nvidia. Estas dinámicas contrastantes colocan a la empresa en una encrucijada estratégica, donde el más mínimo error podría redibujar el equilibrio de fuerzas en el mercado.