El paisaje financiero del bitcoin está experimentando una metamorfosis silenciosa. Blockstream, gigante de la infraestructura blockchain, acaba de desvelar una iniciativa que podría reescribir las reglas del crédito institucional. Con tres fondos que totalizan varios miles de millones de dólares, la compañía abre una brecha sin precedentes: transformar el bitcoin en un apalancamiento líquido sin necesidad de venderlo. Una audacia que coloca a los poseedores de BTC en el centro de un sistema financiero paralelo, donde el oro digital finalmente se convierte en un activo productivo.