A pesar de las crecientes sanciones económicas, Rusia continúa encontrando formas creativas de eludir las prohibiciones occidentales. Según el informe de CERA, la Federación rusa ha vendido casi 2 mil millones de dólares en petróleo a países occidentales a través de intermediarios. Esta cifra muestra la ingeniocidad con la que el Kremlin mantiene su economía a flote a pesar de las restricciones.