Las cifras caen, secas e implacables. En un mes, la actividad de los desarrolladores en Ethereum, pilar del ecosistema cripto, ha caído un 11,8 %. Una recaída que no es aislada: BNB Chain, Polygon, Arbitrum... Todos ven cómo se desmoronan sus métricas. Peor aún, según Santiment, algunas redes pierden hasta un 25 % de su actividad. Esta deserción progresiva de los programadores, nervio de la innovación en blockchain, no es una simple fluctuación. Es una señal crítica para un sector que se soñaba imparable.