¿Y si decir "gracias" a una inteligencia artificial costara millones? Sam Altman, CEO de OpenAI, revela que las marcas de cortesía en las solicitudes dirigidas a ChatGPT pesan mucho en los costos operativos. Detrás de esas interacciones humanas anodinas se esconde una tensión inesperada entre la amabilidad y el rendimiento técnico. Esta paradoja plantea preguntas fundamentales sobre el diseño de las IA, sus usos cotidianos y la sostenibilidad económica de un modelo en plena expansión.