Las turbulencias de los mercados financieros amplifican las preocupaciones de los inversores, que buscan activos capaces de resistir a los altibajos económicos y geopolíticos. En este contexto, el bitcoin, el oro y la plata se revelan como refugios estratégicos. Estos tres activos encarnan una respuesta concreta ante las amenazas que representan los crecientes déficits públicos, la inflación duradera y la fragilidad de las obligaciones tradicionales. Brian Russ, director de inversiones en 1971 Capital y experto reconocido, ilumina sobre la emergencia de esta nueva dinámica. Analiza el papel creciente de estos activos en la reorganización de las carteras de inversión.