¿Realmente podría el DOGE ayudar a reducir la colosal deuda de los EE. UU.?
Donald Trump está de regreso, y con él, un aire de renovación sopla sobre los Estados Unidos. Mientras los entusiastas de las criptomonedas celebran la idea de una regulación más ligera que favorezca a Bitcoin y Dogecoin, otros se preguntan si esta nueva dirección económica no es más que un farol. Entre el optimismo y el escepticismo, el debate se enciende, especialmente con la creación del Departamento de la Eficiencia Gubernamental (DOGE) bajo la dirección de Elon Musk y Vivek Ramaswamy.
DOGE: ¿una oportunidad para rediseñar la economía estadounidense?
El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca viene acompañado de una innovación audaz: el Departamento de la Eficiencia Gubernamental, apodado DOGE. Dirigido por Elon Musk y Vivek Ramaswamy, esta entidad tiene como objetivo reducir drásticamente el gasto público y simplificar la burocracia.
Brian Armstrong, CEO de Coinbase, ve una oportunidad única para redefinir la economía estadounidense a favor de más libertad.
« Los Padres Fundadores eran brillantes, pero no anticiparon los desvíos presupuestarios democráticos », tuitea Armstrong.
Para remediarlo, propone una reforma constitucional que limite el gasto al 10% del PIB. Una idea audaz, pero que hace rechinar los dientes.
Algunas cifras para comprender:
- La deuda estadounidense supera los 34 billones de dólares, es decir, más del 120% del PIB;
- Un posible tope al gasto del 10% del PIB representaría un recorte presupuestario sin precedentes;
- Una soberanía presupuestaria con dividendos para los ciudadanos podría redistribuir posibles excedentes.
DOGE parece entonces cristalizar ambiciones de reforma, pero su cercanía con Dogecoin, la famosa memecoin, no deja de hacer sonreír, o rechinar los dientes, dependiendo de las sensibilidades.
La comunidad cripto entre euforia y prudencia
Los entusiastas de las criptomonedas aplauden a rabiar: el precio del Dogecoin se disparó a 0,39 $ tras el anuncio, alcanzando su nivel más alto del año. Pero detrás de este aumento persiste la desconfianza. Musk, a menudo acusado de manipular el precio de las criptomonedas, ya ha sido objeto de demandas, de las cuales salió indemne en 2022.
Para los inversores, DOGE se está convirtiendo en un símbolo. Coinbase ve en este proyecto la posibilidad de llevar a los Estados Unidos hacia una economía más responsable e innovadora, un terreno fértil para las criptomonedas. Los escépticos, por su parte, temen que esta iniciativa no sea más que una fachada para desviar la atención de problemas estructurales.
La comunidad cripto, al igual que los estadounidenses, sigue dividida:
- Algunos creen en un futuro donde Bitcoin y Dogecoin cohabitarán con un Estado más ligero;
- Otros temen una burbuja especulativa alimentada por el entusiasmo de Musk y Armstrong;
- Los curiosos, por su parte, observan desde lejos, esperando ver si DOGE cumplirá sus promesas.
Se sabe que Elon Musk, con la mirada fija en una deuda estadounidense considerada «insostenible «, parece querer sonar la alarma y detener la hemorragia. Al integrar este nuevo departamento, espera devolver la esperanza a una economía en busca de estabilidad. Las apuestas están abiertas.
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¡La revolución blockchain y cripto está en marcha! Y el día en que los impactos se sientan en la economía más vulnerable del mundo, contra toda esperanza, diré que fui parte de ella
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