Los mercados financieros están nuevamente bajo presión, y Bitcoin no escapa a la tormenta. La criptomoneda más famosa, a menudo considerada un barómetro del sentimiento de riesgo global, acaba de alcanzar su nivel más bajo en un mes, sacudida por cifras económicas estadounidenses mixtas. En un momento en el que reina la incertidumbre económica, y donde las decisiones de la Reserva Federal son vigiladas de cerca, se instala un sentimiento de desconfianza entre los inversores.