Bitcoin - La jugada maestra geopolítica de Estados Unidos
La creación de una reserva estratégica de bitcoins se presenta como el mayor terremoto monetario desde el fin de los acuerdos de Bretton Woods en 1971.
El Dilema
La Senadora americana Cynthia Lummis podría poner la primera piedra para una renovación del sistema monetario internacional.
En el estado actual, su proyecto de ley bipartidista (Bitcoin Act) prevé comprar un millón de bitcoins, es decir, el 5 % de la oferta total. La acumulación debería realizarse en cinco años con el objetivo de mantenerlos al menos 20 años.
En lugar de financiar esta reserva con deuda, Cynthia Lummis propone vender las reservas de oro y usar los beneficios obtenidos por la Fed. De hecho, la Fed recauda intereses sobre varios billones de dólares en bonos del Tesoro comprados a través del famoso Quantitative Easing.
Esta estrategia debe ponerse en paralelo con el rápido declive de la participación del dólar en las reservas de divisas globales. Ante la desconfianza global hacia el dólar, es esclarecedor hacer un pequeño recorrido histórico para comprender la magnitud de la creación de una reserva estadounidense de bitcoins.
Fue en Bretton Woods donde la Libra Esterlina fue oficialmente destronada por el dólar, más de un año antes del final de la Segunda Guerra Mundial. Estados Unidos impuso al billete verde como la moneda pivot hacia la cual todas las demás monedas flotaran.
El oro fue instaurado como salvaguarda para que el comercio internacional se realizara en condiciones de igualdad. Dicho de otra manera, Washington debía convertir el dólar en oro a demanda, lo que le impedía abusar de la impresión de billetes para financiar las importaciones.
Sin embargo, este sistema llevaba en sí mismo la semilla de su propia destrucción. El obstáculo fue articulado ya en 1960 por Joseph Triffin. El dilema de Triffin explica que los países cuya moneda es una moneda de reserva internacional deben necesariamente tener un déficit comercial para permitir que otros países mantengan reservas.
Este imperativo matemático hace que un déficit comercial permanente sea la condición necesaria para inundar al mundo con su moneda.
Del oro al petrodólar
Estados Unidos debía proporcionar la moneda internacional mientras prometía convertirla en oro. Pero ante el crecimiento del comercio internacional, pronto se volvió imposible cumplir esta promesa manteniendo una paridad fija de 35 dólares la onza de oro.
De modo que tras solo dos pequeñas décadas, ya había siete veces más dólares en circulación en el mundo que oro en Fort Knox. Entre las causas, la costosa guerra de Vietnam y el pico petrolero obligaron a Estados Unidos a importar mucho petróleo desde el Medio Oriente.
Los acuerdos de Bretton Woods colapsaron cuando Francia y otros países europeos reclamaron la conversión de sus dólares en oro. El presidente Richard Nixon pondrá fin al «Gold Standard» en 1971.
Entonces llegó el advenimiento del sistema conocido como petrodólar. Lo que se presentaba como una grave debilidad económica (pico petrolero de 1971) resultó ser una oportunidad como pocas se han visto en la Historia. La genial maniobra geopolítica fue obligar a las naciones de la OPEP a vender su petróleo exclusivamente en dólares.
El petróleo, siendo la sangre de toda economía industrializada, obligó al mundo entero a permanecer leal al dólar. De modo que Estados Unidos pudo dejar que su déficit comercial se expandiera sin que el dólar se devaluara. Estados Unidos es la única nación que tiene este privilegio.
La explicación radica en que los dólares acumulados por las naciones exportadoras no se convierten en sus monedas nacionales, sino que se invierten en deuda americana (para ganar intereses). Tal es el exorbitante privilegio: mostrar un balance comercial crónicamente deficitario mientras se endosa fácilmente a bajo costo.
El reverso de la moneda es que la deuda pública americana representa ahora el 37 % de la deuda pública mundial. El gobierno de EE. UU. debe 7 billones de dólares al resto del mundo…
Hacerse con los bitcoins antes (casi) que el resto del mundo permitiría reducir la factura. Ese es el objetivo declarado por la Senadora Cynthia Lummis.
BRICS y dedolarización
Muchas naciones temen que Estados Unidos no pague sus deudas y el «congelamiento» de las reservas rusas (300 mil millones de euros y dólares) no ha hecho más que empeorar las cosas. La dedolarización es ahora un objetivo asumido por los BRICS, recientemente unidos por tres grandes exportadores de petróleo (Irán, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita).
Las relaciones de poder ya no son las mismas que en los años 70. China se ha convertido en la primera economía mundial por paridad de poder adquisitivo. Los BRICS+ representan el 46 % de la población mundial y el 35 % del PIB mundial (PPA).
Entre otras métricas, el club es responsable de aproximadamente el 25 % de las exportaciones globales. También produce el 42 % del trigo, el 52 % del arroz y el 46 % de la soja. También representa el 43 % de la producción de petróleo (y el 44 % de las reservas mundiales). O el 35,5 % de su producción de gas (y el 53 % de las reservas).
Una evolución del sistema monetario internacional es inevitable en los próximos años. Washington lo sabe y las tensiones geopolíticas son una consecuencia directa de este temor. Es en este contexto que se debe analizar la ambición estadounidense de crear una reserva de bitcoins.
El bitcoin tiene todos los atributos de una moneda de reserva internacional perfecta. La primera razón es que resuelve el paradoja de Triffin al ser apátrida. La segunda es que puede circular fácilmente, un requisito que siempre ha faltado al oro.
Así, después de las oportunidades que fueron la compra de los territorios de Manhattan, Luisiana, California y Alaska, Estados Unidos se prepara nuevamente para hacer el negocio del siglo.
Era natural que fueran los Estados Unidos los que se lanzaran al agua primero, ya que son aquellos que más tienen que perder si el bitcoin se impone como el activo de reserva del próximo milenio. Si todo sale como se espera, Michael Saylor predice que un solo bitcoin alcanzará los 13 millones de dólares.
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Periodista de Bitcoin, geopolítica, economía y energía.
Las ideas y opiniones expresadas en este artículo pertenecen al autor y no deben tomarse como consejo de inversión. Haz tu propia investigación antes de tomar cualquier decisión de inversión.