¿El bitcoin es realmente mágico?
¿Es el bitcoin una moneda que puede aumentar mágicamente el poder adquisitivo global? No es tan simple.
Poder adquisitivo = Productividad
El poder adquisitivo depende de nuestra productividad. Es decir, la cantidad de cosas producidas por persona. Esta productividad solo puede venir de las máquinas ya que solo tenemos dos brazos y dos piernas. Una máquina de coser, un camión, una excavadora, una pala, etc.
Ahora bien, estas máquinas necesitan energía. Más del 95 % del transporte mundial funciona con combustibles fósiles como el petróleo. Una pala no consume energía, pero la requiere para su fabricación. Es necesario poder llevar el mineral de hierro a su punto de fusión (1538 °C), un proceso muy energético.
Todo esto para decir que no basta con que la cantidad de dinero en circulación sea fija para que podamos aumentar mágicamente nuestro nivel de vida. La productividad no es un truco monetario. ¡Es energía!
Problema, hemos superado el pico de petróleo convencional (el que es barato extraer) en 2007.
Segundo problema, más de la mitad del PIB mundial está « contenido » en los intercambios internacionales. La economía mundial está hoy totalmente interconectada. Ningún objeto de la vida cotidiana, ya sea una silla, una máquina de café, una camiseta, un accesorio deportivo o una botella de detergente, escapa a la globalización. Todo o parte de esas cosas han requerido una materia prima o una etapa de fabricación extranjera.
Dicho de otra manera, la disminución energética irá acompañada de una desglobalización y una reducción física de los intercambios. Esto resultará en inflación, mucha inflación. Ya estamos allí. Es hora de intercambiar sus ahorros bancarios (cuya valor está siendo consumida por la inflación) por un valor refugio.
Es aquí donde el bitcoin puede ayudar. Pero primero, hablemos del pico.
Pico del petróleo? ¿Perdón?
¿Qué pico? Nunca hemos producido tanto petróleo, dirán algunos. Cierto, pero todo depende de qué petróleo estamos hablando.
Las cifras de la producción mundial de petróleo se distorsionan con la inclusión de tipos de petróleo que no se utilizan para producir los combustibles necesarios para barcos, coches y camiones sin los cuales la economía colapsaría.
Jean-Marc Jancovici señala en su página de Linkedin que el «verdadero petróleo» se compone de moléculas con al menos cinco átomos de carbono.
« Pero ahí está: la AIE tiene la costumbre de contar como petróleo los ‘líquidos de gas’, es decir, etano, propano y butano, que provienen de yacimientos de gas y que no son la base de los combustibles, sino del plástico. ¡Son 13 millones de barriles al día, no es pequeño! Sin contar los biocombustibles », avanza.
Para el ingeniero politécnico, la producción de petróleo crudo (82 millones de barriles por día) continuará estancada unos pocos años más antes de declinar a partir de 2030.
La consecuencia directa será una disminución de los flujos físicos que sustentan la economía. La ley de la oferta y la demanda siendo la que es, esta disminución se manifestará en forma de inflación.
Claro, la producción de petróleo aún no ha disminuido. Sin embargo, la rentabilidad del petróleo convencional es de 30 dólares por barril, contra 65 dólares para los nuevos pozos de «petróleo de esquisto». Y 200 dólares en la Antártida. El petróleo de los fondos de cajón es más caro de extraer. De ahí el aumento de los precios en las gasolineras.
Este aumento del precio del combustible se traduce en un aumento generalizado de la inflación ya que todo lo producido debe ser transportado, a menudo desde el otro lado del mundo…
Productividad = Máquinas = Energía = Petróleo (barato).
Menos energía y/o energía más cara significa menos poder adquisitivo por persona.
« No hay problema, enfoquémonos en la nuclear »
Lamentablemente, la nuclear representa solo una décima parte de la electricidad mundial y apenas 4 % de la energía total. La fisión del átomo no sustituirá a los combustibles fósiles (82% de la energía final en 2023) en unas pocas décadas.
Actualmente, el mundo cuenta con 440 reactores nucleares. Pasar del 4 % al 100 % de la energía requeriría la construcción de alrededor de 11 000.
No llegaremos allí ya que solo 61 reactores están en construcción por el momento y se necesita ocho años para construir uno. A este ritmo, el mundo necesitaría 1 400 años para funcionar con energía nuclear…
Otro problema, tenemos una limitación en el cobre y el litio. Estos elementos esenciales para todo lo eléctrico son factores limitantes.
¿Qué hay del proyecto ITER? ¿No promete la fusión nuclear energía infinita y libre de carbono? Primero sería necesario saber generar plasma a varios millones de grados sin detenerse, frente a los escasos seis minutos actuales… Y poder «recuperar» esa energía en forma de electricidad.
Además, el problema del tiempo sigue siendo el mismo, así como la limitación en la danza del cobre/litio. Para JM Jancovici, un posible prototipo de un reactor de fusión no llegará antes de 2100…
Bitcoin
Los límites físicos de nuestro exangüe planeta se impondrán a nuestro bolsillo, sea lo que sea que votemos… Ya es el caso. Echar la culpa a los políticos o a los bancos centrales no cambiará la realidad geológica.
Los economistas de la escuela austriaca que repiten todo el día: « abundancia a través de la escasez » están en negación. No basta con congelar la masa monetaria para hacer surgir petróleo. No hay litio, ni gas, ni centrales nucleares en la blockchain…
[No se pierda nuestro artículo: Los economistas austriacos frenan la adopción del bitcoin.]
La energía es un factor limitante de la globalización. La reducción de los intercambios (que llegará, « más temprano que tarde ») irá acompañada de una disminución de la productividad. En Francia, el pico del número de metros cuadrados construidos y toneladas cargadas en camiones data de 2007, el año del pico de petróleo barato…
En resumen, la inflación empeorará y beneficiará a los ricos que poseen los activos deseables. Estos activos son bienes inmuebles de prestigio, pinturas de grandes maestros, objetos de colección, etc. Cosas que no están al alcance de las pequeñas carteras que, por el contrario, sufren la inflación.
El único activo que se aprecia más rápidamente que la inflación y que está disponible para el público en general es la bolsa. Pero, ¿quién puede presumir de saber apostar al caballo ganador?
Es por eso que el Bitcoin está indicado para las masas. Es en esto que es mágico. No es difícil entender que el bitcoin es la única cosa en el mundo que existe en una cantidad absolutamente limitada y accesible para todos.
El bitcoin es divisible en 100 millones de satoshis, no la Mona Lisa. Todos pueden comprar 10, 100 o 1000 euros de bitcoin. El Bitcoin es la Mona Lisa de los pobres. Es un baluarte contra el aumento de las desigualdades.
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Reporting on Bitcoin, "the goddess of wisdom, feeding on the fire of truth, exponentially growing ever smarter, faster, and stronger behind a wall of encrypted energy".
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