Desempleo en Francia: Un pico inédito desde hace una década

La situación del empleo en Francia está experimentando un deterioro preocupante. Según las últimas cifras publicadas el 27 de enero de 2025 por el Ministerio de Trabajo, el número de demandantes de empleo sin actividad (categoría A) ha aumentado un 3,9 % en el cuarto trimestre de 2024 en comparación con el trimestre anterior. Esto representa 117 000 desempleados adicionales, llevando el total a 3,1 millones de personas, un nivel que no se había observado desde hace una década, excluyendo el período de Covid-19.

El desempleo en fuerte aumento en Francia: una alerta sobre el mercado laboral

Este aumento marcado se explica por varios factores. En el ámbito económico, el crecimiento del PIB en 2024, aunque estimado en 1,1 % por el Insee, se ha ralentizado a finales de año, con una stagnación en el último trimestre. Además, el fin de las ayudas post-Covid ha provocado un repunte de las quiebras de empresas, alcanzando 65 764 casos en el año (+16,8 %). Algunas grandes empresas en Francia, como Michelin o Casino, también han implementado planes sociales, acentuando la presión sobre el mercado laboral.

Los jóvenes son particularmente afectados por este deterioro. De hecho, el número de demandantes de empleo menores de 25 años ha aumentado un 8,5 % en el último trimestre de 2024, consecuencia de los ajustes de plantilla por parte de las empresas, donde los contratos precarios, a menudo ocupados por jóvenes, son los primeros en verse afectados. La incertidumbre política en Francia, especialmente desde la disolución de la Asamblea Nacional, también ha pesado sobre las contrataciones y las inversiones, amplificando esta tendencia.

Un entorno tenso en 2025

Este aumento del desempleo en Francia se produce en un contexto de discusiones presupuestarias tensas para 2025. El gobierno contempla reducir algunas ayudas al empleo, como las exenciones de cotizaciones sociales o la prima de aprendizaje, lo que preocupa a las organizaciones patronales. El Medef ha alertado sobre los riesgos para la competitividad de las empresas, pidiendo evitar cualquier medida que aumente el costo del trabajo.

Con una tasa de desempleo actualmente del 7,4 %, el Insee prevé por lo tanto un aumento al 7,6 % para mediados de 2025, mientras que el Banco de Francia anticipa un 7,8 % para finales de 2025. Para los economistas, este repunte es una señal de alarma, que requiere medidas rápidas y concertadas para evitar un agravamiento de la situación en Francia, especialmente para los jóvenes y los trabajadores más precarios.